El Diario de Atacama | 16 de marzo 2024
El Llanquihue | 16 de marzo 2024
Los primeros días de febrero fueron duros para Chile. A los devastadores incendios de Viña del Mar y Quilpué se sumó el fallecimiento de Sebastián Piñera. El dolor que todos sentimos nos impactó a tal punto que frente a la partida del ex Presidente hubo muestras de reconocimiento hacia él de casi todos los sectores.
No lo había visto antes. También hubo mea culpas.
El más notorio fue el del Presidente Gabriel Boric, quien indicó que en su oposición al gobierno anterior, «las querellas y recriminaciones fueron en ocasiones más allá de lo justo y razonable». Reconocer los errores es muy valioso para poder acercarnos, siempre que actuemos con grandeza y voluntad.
Fueron momentos en los que visualicé cercanía y mayores posibilidades de encuentro. La vulnerabilidad, que no es debilidad, nos baja la guardia y nos habilita para conversar y acordar. Pero el tiempo hace lo suyo y lo que fue una noticia deja de serlo.
¿Dónde quedó la vulnerabilidad? ¿Tendremos que esperar eventos trágicos para encontrarnos, recordar lo que es importante y trabajar por ese propósito?